CONTEXTO Y DIAGNÓSTICO
En los últimos 15 años el país experimentó profundos cambios: la población urbana creció, la esperanza de vida aumentó, el nivel educacional de los ciudadanos mejoró, el promedio de hijos por mujer bajó, la cantidad de habitantes por hogar se redujo, las ciudades se volvieron más densas y la migración diversificó los barrios.
Es decir, las ciudades se hicieron más complejas, multiplicando los desafíos para la planificación y la inversión equitativa en el territorio, de forma de no dejar atrás a quienes viven en condiciones de mayor precariedad urbana.
Y es aquí donde se nos presenta una oportunidad para redefinir la ciudad, con un trabajo en común de académicos, autoridades, empresarios y ciudadanos.
Nuestros objetivos son colaborar en reducir a la mitad la población que hoy vive en zonas prioritarias de inversión urbana al mediano plazo y ayudar a posicionar a las ciudades de Chile como las de mejor nivel de bienestar territorial de Latinoamérica en el largo plazo.
Para ello consideramos primordial “Medir” y a partir de la evidencia, ayudar a comprender la dinámica de las ciudades. Con esta información poder “Dialogar”, facilitando la construcción de espacios de confianza en los que se simplifica el lenguaje técnico, se disminuye la asimetría de información y se posibilita el acercamiento entre las partes en pos del bien común. Esto constituye la base del “Acordar” y la posibilidad de materializar – con nuevas herramientas- acuerdos de largo plazo cuyo objetivo sea facilitar el “Hacer” y así lograr el desarrollo sostenible de nuestras ciudades.
A través del “Medir, Dialogar, Acordar y Hacer” se busca promover y acompañar el desarrollo de proyectos urbanos y, con esta experiencia práctica, aportar al diseño de las políticas públicas.