A través de una inédita alianza, la iniciativa urbano-climática busca aportar a enfrentar los efectos del cambio climático en zonas más afectadas.

“Barrios por el Clima” fue parte del primer Congreso Hábitat y Salud de la Universidad de Los Andes, donde Martín Andrade, Director Ejecutivo de Corporación Ciudades y Eduardo Aninat, Coordinador del Programa de Conservación de Fundación Ibáñez Atkinson, presentaron la iniciativa que reúne a distintas organizaciones: Ibáñez Atkinson, Corporación Ciudades, Bosko, Mi Parque, Patio Vivo y el Magíster en Arquitectura Sustentable de la Pontificia Universidad Católica de Chile, con el objetivo de afrontar desde el diseño urbano los efectos del cambio climático en aquellas zonas más afectadas en el Gran Santiago.

Martín y Eduardo enfatizaron en que es importante el cómo la ciudad puede aportar a una mejor salud y calidad de vida de las personas, especialmente a través de intervenciones en lugares que sufren de mayor manera las consecuencias del nuevo escenario climático.

“Barrios por el Clima” surge a raíz de un estudio realizado durante el año 2023 que, basado en imágenes satelitales de la NASA, analizó las zonas con más altas temperaturas en los últimos 10 años en el Gran Santiago, arrojando que las comunas del sector norponiente fueron las más perjudicadas por las temperaturas máximas diarias en el periodo señalado, logrando incluso detectar las unidades vecinales y la cantidad de población expuesta. Lo anterior dio pie que una serie de instituciones se reuniera para conformar una alianza que permita enfrentar esta situación también de inequidad urbana.

“Pero cuando teníamos el estudio listo y también estas conclusiones, quisimos articular algo mucho más grande y es por eso que hoy estamos trabajando con distintas organizaciones que están en terreno, como Fundación Mi Parque, Bosko y Patio Vivo, para tomar acciones concretas y así mitigar estos efectos del cambio climático y de las olas de calor, en este caso en Santiago”, dijo Eduardo Aninat.

En ese sentido es que en la exposición, detallaron que tras el análisis de las olas de calor se determinó hacer una priorización de aquellas unidades vecinales más susceptibles y donde se requieren intervenciones más urgentes, a través de una metodología que se basó en puntajes asignados de acuerdo a exposición de los sectores a más altas temperaturas, mayor densidad poblacional, aquellas áreas vulnerables de baja cobertura vegetal y así también la disponibilidad de espacios de intervención.

“Así fue como dividimos las oportunidades primero en calzadas, bandejones centrales, plazas y parques, cobertura vegetal. Por otro lado, también vimos equipamientos educacionales, deportivos, sociales y lugares que eventualmente pudiesen transformarse en refugios climáticos, lo cual es muy importante porque hay muchos espacios que lamentablemente y producto una mala planificación y diseño urbano son lugares que hay poca posibilidad de intervenir en el espacio público porque muy poco espacio público y por tanto estos espacios pueden cumplir un rol”, añadió Martín Andrade.

Como pasos actuales y futuros, mencionaron que se está en conversaciones con algunos municipios para la implementación de la estrategia, además de buscar que “Barrios por el Clima” pueda ser replicable otras comunas, ciudades y regiones.

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